El bicarbonato de sodio no solo es útil en la cocina: también puede convertirse en una herramienta fundamental para mantener tu jardín limpio, sano y productivo.
Su bajo costo, facilidad de uso y versatilidad lo vuelven indispensable para cualquier amante de las plantas.
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Estos son 10 usos prácticos del bicarbonato en el jardín que te van a sorprender.
1. Para repeler insectos naturalmente
Prepará un insecticida casero mezclando 1 litro de agua, 2 cucharadas de bicarbonato, 1 cucharada de aceite de oliva y unas gotas de detergente.
Colocalo en un rociador y aplicalo sobre las plantas cada tres días para mantener alejados pulgones y otros bichitos molestos.
2. Para eliminar hormigas del jardín y del hogar
Mezclá 5 cucharaditas de bicarbonato, 5 de azúcar impalpable y una cucharada de agua.
Aplicalo en los caminos de las hormigas o directamente sobre los hormigueros. Es un método simple, casero y sin venenos.
3. Para combatir gusanos en cultivos
Una mezcla de partes iguales de harina y bicarbonato, espolvoreada sobre tus plantas, te ayuda a eliminar gusanos que atacan hojas y tallos, como los de la col.
Actúa rápido sin dañar el cultivo.
4. Para limpiar adornos del jardín
Espolvoreá bicarbonato sobre estatuas, macetas decorativas o muebles de exterior, y pasales un trapo húmedo.
Vas a sacar la suciedad acumulada sin usar productos agresivos.
5. Para limpiar hojas de plantas
Disolvé una cucharadita de bicarbonato en un litro de agua y usá un paño suave para limpiar las hojas.
Este método realza el brillo y elimina polvo o residuos sin dañar la planta.
6. Para mejorar el sabor de tus hortalizas
Espolvoreá un poco de bicarbonato en el suelo de tomates, zapallitos u otras verduras.
Esto reduce la acidez del terreno, lo que da como resultado vegetales más dulces y sabrosos.
7. Para regar las flores
Agregá una cucharadita de bicarbonato en tu regadera.
Vas a notar que tus flores se ven más sanas, con colores intensos y crecimiento más firme.
8. Para prolongar la vida de las flores en floreros
Si te gustan los ramos frescos, agregá al agua del florero una pizca de sal y otra de bicarbonato.
Esto retrasa el marchitamiento y mantiene las flores radiantes por más tiempo.
9. Para combatir hongos y moho
