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Más Sabor: Añade una rama de canela, un par de clavos de olor o una pizca de cardamomo mientras calientas la leche.
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Versión Express: Si no tienes pasta, simplemente mezcla en una taza: cúrcuma en polvo, una pizca de pimienta negra, jengibre en polvo, canela y un chorrito de agua caliente para disolver. Luego completa con tu leche caliente y el aceite.
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Para Dormir: Es perfecto tomarlo por la noche, ya que es relajante y promueve un sueño reparador.
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Precaución: La cúrcuma puede manchar. Lava tu taza y utensilios pronto.
¿Cuándo Tomarlo?
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Por la mañana: Para un comienzo lleno de energía y antioxidantes.
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Por la noche: Como un ritual relajante antes de dormir.
Es una bebida versátil, llena de sabor y con un poder medicinal increíble. ¡Anímate a incorporarla en tu rutina!