Esposa vs Amante: Una Reflexión Profunda sobre el Amor, la Rutina y el Deseo

La respuesta quizás no esté en buscar un jardín secreto, sino en cultivar el propio. La reflexión más profunda nos lleva a considerar que la pareja que perdura es aquella que logra:

  1. Introducir el Deseo en la Rutina: Encontrar formas de romper la monotonía, de seducirse de nuevo, de crear espacios de intimidad que estén libres de las cargas del día a día.

  2. Ver al Otro con Ojos Nuevos: Recordar que la persona con quien se comparte la vida no es solo un compañero de logística, sino el mismo ser deseable que una vez se conoció. Fomentar el misterio, las aficiones individuales y el espacio personal.

  3. Aceptar que el Amor es un Verbo Activo: El deseo no se mantiene solo. Requiere de la misma intención y esfuerzo que poner un techo o criar un hijo. Es una elección diaria de ver la magia en lo ordinario.

Al final, la tragedia no es la figura de la esposa o la amante, sino la renuncia a la complejidad humana. La verdadera hazaña no es tener una amante, sino lograr que la esposa nunca deje de serlo.