Además de mejorar la circulación, esta combinación tiene otros efectos positivos para tu cuerpo:
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Estimula la digestión: ayuda al movimiento intestinal y combate el estreñimiento.
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Desintoxica el hígado: el limón apoya la limpieza hepática, y el aceite estimula la producción de bilis.
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Refuerza el sistema inmunológico: gracias a su contenido de antioxidantes y vitamina C.
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Disminuye la inflamación interna: lo que puede ser útil en afecciones como artritis o gota.
¿Quiénes deben tener precaución?
Este remedio es natural, pero hay casos donde se necesita supervisión médica:
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Personas con problemas en la vesícula biliar (como cálculos)
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Personas que toman anticoagulantes
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Alergias a cítricos o al aceite de oliva
Si estás bajo tratamiento médico, consulta con tu doctor antes de incorporar este hábito.