Aquí está, ahora, con todas las cartas en la mano para limpiar las joyas de oro y restaurarlas a su antigua gloria. Agua hirviendo, vinagre blanco, agua salada, agua de cocción, líquido lavavajillas, jabón negro, jugo de limón, vinagre de alcohol, sea cual sea el método, lo principal es limpiar bien la joya tratándola con cuidado, delicadeza y respeto.
Ya no necesitará llevar sus joyas finas al joyero para que las limpie. ¡Eres capaz de ello y más bien dos veces que una!