En cuanto a accesibilidad y eficiencia nutricional, el huevo también destaca por su excelente relación calidad-precio. Ofrece una densidad nutricional excepcional a una fracción del costo de otras fuentes de proteína de alta calidad. Es una solución eficaz contra la desnutrición y un pilar fundamental de la economía familiar, ya que aporta vitaminas A, D, E, B12, hierro y antioxidantes como la luteína y la zeaxantina, esenciales para la salud ocular.
Durante décadas, se le acusó injustamente de elevar el colesterol malo. Sin embargo, la ciencia moderna lo ha exonerado, demostrando que, para la mayoría de las personas, el consumo moderado de huevos no afecta negativamente los niveles de colesterol en sangre e incluso puede mejorar el perfil lipídico.
Por todas estas razones, el huevo es mucho más que un alimento. Es un referente en versatilidad culinaria, economía y, sobre todo, en nutrición pura y eficiente. Es hora de reconocerlo no como un simple ingrediente, sino como uno de los diseños más perfectos de la naturaleza para sustentar la vida.