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1 semilla de aguacate
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200 ml de aceite de oliva o aceite de coco
Preparación:
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Lava y seca la semilla.
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Rállala o córtala en trozos pequeños.
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Mezcla la semilla con el aceite en un frasco de vidrio.
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Deja reposar en un lugar oscuro por 2 semanas.
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Cuela el aceite y almacena en frasco limpio.
Uso:
Masajea el área afectada durante 10-15 minutos dos veces al día.
Beneficios: Alivia el dolor, relaja los músculos y mejora la circulación.
2. Pomada de semillas y jengibre
re:
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1 semilla de aguacate
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1 cucharadita de jengibre rallado
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100 g de manteca de karité o aceite de coco
Preparación:
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Ralla la semilla.
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Colócala en una olla con el jengibre y la manteca de karité.
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Cocina a fuego lento por 30 minutos.
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Enfría y guarda en frasco limpio.
Uso:
Aplicar sobre zonas doloridas con masajes suaves dos veces al día.
Beneficios: Combinación antiinflamatoria potente para calmar el dolor y reducir el dolor.
3. Infusión de semilla de aguacate
re:
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1 semilla de aguacate
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500 ml de agua
Preparación: