10. Pescados grasos: sardinas y salmón del Pacífico
Don José, jubilado de 72 años de Ensenada, comía sardinas en lata porque eran baratas.
Nunca imaginó que esos omega-3 estaban bajando la inflamación de sus rodillas.
Hoy camina todos los días por el malecón sin bastón.
Los omega-3 reducen sustancias inflamatorias y mejoran la lubricación articular.
La vitamina D natural del salmón también ayuda al cuerpo a usar mejor el calcio.
9. Kale o col rizada: la verdura que pocos conocen en México… pero que ya llega a los mercados
Contiene vitamina K1, esencial para dirigir el calcio hacia los huesos y no hacia las arterias.
También aporta calcio vegetal y antioxidantes que combaten la inflamación.

Un puñadito diario en jugo verde o salteado con ajo puede ser un gran apoyo.
8. Zanahoria: el snack naranja que protege tu cartílago todos los días